Un tiempo nuevo.

Quizá el día 13 de enero de 2016 no nos diga nada de aquí a unos años o incluso en pocas semanas. Sin embargo, lo que estamos viviendo en los últimos meses será muy difícil de borrar, sobre todo para los más jóvenes, que nos sentiremos como nuestros padres y abuelos en el periodo iniciado en el 75.

Si, esto es una Transición  2.0, más fuerte y con más ímpetu si cabe. La fuerzas emergentes en el Parlamento, Podemos y Ciudadanos, traen de un modo u otro aire fresco, y poder de limitación sobre los partidos que se han turnado en el poder desde 1982, PP y PSOE. De ellos se espera, además de propuestas, decencia y cercanía al pueblo que tan ignorado ha sido por el poder desde hace mucho tiempo.

El 15M supo ver la necesidad de cambiar el país desde
dentro de las instituciones

Por otro lado las emergencias del país son muy fuertes, empezando por los desahucios y suministros básicos pasando por una reforma que haga independiente a la justicia y otra que haga de la Constitución una Carta Magna realmente posible de cumplir.

Tenemos delante de nosotros una oportunidad histórica, y todos debemos estar a la altura. Sus señorías para legislar por el bien del resto y los ciudadanos para ser pacientes y distinguir a quien esté trabajando de verdad por su pueblo de quien no.

No sabemos cuándo habrá gobierno o si habrá elecciones anticipadas pero en ningún caso debemos tener miedo a avanzar y a que España progrese y cambie a mejor.

Porque al fin y al cabo, quienes debemos mandar, somos nosotros.